Aunque me consta que ya llevan días por la provincia, no ha sido hasta hoy cuando he escuchado los primeros carriceros comunes por el Arlanza. Ya son numerosos y no solo en el gran río, sino también en alguno de sus afluentes. No tengo fotos.
Disfruté durante un rato de los movimientos de una pareja de aguiluchos cenizos haciendo la parada nupcial. Quiebros, cabriolas, giros, pico arriba, pico abajo, picados, ascensiones bruscas, silbidos, aleteos profundos... Todo un espectáculo. Foto de cada uno de los miembros de la pareja en pleno vuelo acrobático. Arriba hembra, abajo macho.
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En una balsa de riego, en Tordómar, vi el enésimo chorlitejo chico de este paso. La diferencia es que este sí es buen sitio para que críe la especie. Habrá que estar atentos.
En un pequeño parque rural de Paules del Agua, un torcecuello se ponía morado de hormigas en el suelo. En cuanto me vio alzó el vuelo hasta el cobijo de una sauceda. Aún así pude hacerle una foto testimonial, la primera que aparece de esta esquiva especie en este blog.
Cerca de allí, un grupo de golondrinas se afanaba en recoger barro para construir o reparar sus nidos. Esta es una de ellas.
Y cerca de Santa Cecilia, este lagarto ocelado mudando la piel, al sol, como no puede ser de otra manera.
